El domingo pasado, por la tarde, Vicente y yo salimos a dar el paseo de rigor por un tramo del Camino.
En esta ocasión y buscando la brisa marinera, nos fuimos hasta el pueblo y playa de La Isla, para hacer ida y vuelta hasta donde el cuerpo y el calor nos dejaran.
La ausencia de brisa y el excelente aspecto que presentaban los pozos de la playa de La Beciella o de Los Romeros como nos gusta denominarla, por ser allí donde desemboca el arroyo del mismo nombre, resultó una tentación más que suficiente para no llegar más lejos que al próximo arenal de Morís y volver, para darnos un chapuzón casi en solitario.
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| El agua del arroyo de Los Romeros alcanza el Mar Cantábrico |
La razón de este milagro en un día como ayer en Asturias, es que a esta playa se accede de manera exclusiva a través del Camino, aunque siempre hay algún osado que es capaz de meter el coche en la mismísima catedral de Santiago.
Que tomen buena nota todos los que piensen hacer El Camino del Norte en este Verano.
Para estos tres Bicigrinos la tentación no fue suficiente, y siguieron su marcha a toda pastilla.
¡Buen Camino!
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