"Atapuerca - Burgos"

Tal y como teníamos previsto ya estamos en Burgos, después de recorrer los poco más de 20 km. que separan Atapuerca de de la capital burgalesa.

Sin mayor novedad que un poco de "orbayu" y abundante y pegajoso barro, durante el tramo que discurre desde la bifurcación del aeropuerto y Castañares, la jornada fue perfecta.

Otra ronda, para el abuelo Ángel

Antes de ponernos con los pies en el Camino y después del viaje desde Oviedo, recuperamos fuerzas en el mismo bar de Atapuerca, donde lo habíamos hecho en 2013 antes de regresar a casa.

Y así afrontamos el bonito repecho que asciende hasta la cruz y el descenso hasta Villalval y Cardeñuela Riopico con fuerza y ánimo.

Tras dejar atrás Orbaneja Riopico decidimos continuar por la variante del río, por ser bastante más agradable que la que accede a Burgos por los polígonos industriales.

Aquí toca arrastrar los pies, pues el barro parece que tiene "Superglú 5", hasta que decidimos caminar por las fincas colindantes, aliviando un poco el peso extra.

Desde Castañares solo queda seguir las sendas, que paralelas al Arlanzón, los burgaleses utilizan para mantener controlado su colesterol.

Nosotros hacemos lo mismo, realizando una pequeña parada para repostar, degustando los espectaculares pasteles que "güelito" Ángel trajo para los primeros días.

Y poco a poco alcanzamos, por éste confortable paseo, Burgos.

Mañana, si Dios y la red quieren, esperamos poder actualizar desde Hornillos de Camino.