"Hornillos del Camino - Castrojeriz"

Magnífico día para recorrer los poco más de 20 km. que separan el pequeño pueblo de la fuente del Gallo de Castrojeriz.

Lo de magnífico no obedece únicamente a la excelente climatología que nos acompañó durante toda la jornada (sandalia y pantalón corto), también por el paisaje y los momentos vividos a lo largo de la misma.

Si durante los dos primeros días de Camino, no habíamos encontrado a nadie, hoy pudimos compartir agradables momentos con Peregrin@s de lo más variopinto.

Mariano y yo, hicimos varios kilómetros en compañía de Inés, una simpática abuela (de ocho nieto@s) australiana y con una recién estrenada prótesis de titanio en su rodilla derecha.

También con tres american@s que nos pasaron en bici y perdieron unos de los morrales, debiendo dar la vuelta casi hasta Rabé para encontrarlo.

Y además de unas cervezas, también compartimos unos momentos difíciles de olvidar en Hontanas con Jacob, un joven polaco que recorre el Camino con su uquelele en la mochila y lo hace sonar como los ángeles.

Curiosamente en Hontanas, Inés se encontró con un compatriota suyo, de nueve personas; dos eran australianas, otras dos americanas, un polaco, tres españolas y otra también de lejos.

El tramo desde Hontanas a Costrejeriz hoy estaba precioso y no como hace 14 años, en pleno mes de agosto cuando lo "sufrimos" Ana y yo.

El paso bajo el arco de San Antón marca prácticamente el final de la jornada, ...

... pues aunque todavía faltan cuatro km. de pesado asfalto, el castillo y la iglesia de la Virgen del Manzano casi se pueden tocar.

Y sin otra novedad, digna de mención llegamos al final de una preciosa etapa en la que el abuelo Ángel, un día más, fue abriendo camino la mayor parte del día.

Por cierto después de comer, Mariano como la etapa le había parecido corta, decidió subir al castillo para regalarnos unas bonitas fotos del atardecer.

Mañana, si Dios quiere, intentaremos llegar y actualizar desde Fromista.